Hacer una reforma del hogar es una inversión que alguna vez tenemos que hacer muchos en nuestras casas para sustituir viejos equipamientos, mejorar la eficiencia energética o simplemente darle un nuevo aire a nuestra vivienda. Sin embargo, aunque pueda salir rentable con el paso del tiempo, al principio supone una inversión importante, por lo que siemrpe es conveniente sabercómo ahorrar en la reforma de tu vivienda.
1. Aunque pueda suponer un desembolso mayor, a la larga lo más probable es que te salga más barato hacer una gran reforma que muchas pequeñas. Por eso, quizá, te salga más rentable esperar y planificarte, si no tienes nada urgente que sustituir en la casa, y hacerlo todo de una vez.
2. En caso de que vayas a hacer cambios estructurales en tu hogar tendrás que tener obligatoriamente la firma de un arquitecto. Si contratas a un profesional de este tipo o a un interiorista también te podrán asesorar sobre los materiales y la distribución de los mismos para conseguir un mejor resultado con la obra, y además podrán dirigirla, con lo que no tendrás la necesidad de estar en todo momento pendiente de cada elemento.
3. En lugar de contratar a un director de obras puedes encargarte por tu cuenta de esa labor, y ahorras el beneficio de este, pero tómate el tiempo que haga falta para encontrar los materiales adecuados.Compara precios entre diferentes proveedores y acude a fábricas o a tiendas de saldos antes que a negocios minoristas tradicionales, donde podrás encontrar el producto más barato.
4. Consigue por lo menos tres presupuestos sin compromiso y escoge el de mayor calidad-precio. Procura que incluya una cláusula en caso de incumplimiento de los plazos, y que el presupuesto sea detallado y cuente con todos los conceptos.
5. No compres la cantidad justa de material, sino un poco más de lo necesario porque es probable que durante la reforma se produzca alguna rotura o se desperdicie algo.
6. Lo que más va a hacer que tu reforma sea rentable en el futuro es la forma en que influirá en el consumo energético de tu hogar. Merece la pena invertir un poco más en conseguir un buen aislamiento térmicosi ello va a hacer que gastes menos electricidad en calefacción, por ejemplo. Unos buenos cerramientos en las ventanas y una iluminación eficaz de las habitaciones, por ejemplo, puede hacer que tu inversión extra se amortice en pocos años, y a partir de entonces ahorrarte un buen dinero.
Los aislantes térmicos en fachadas y suelos también reducirán la necesidad de encender la calefacción y mejorarán la comodidad de tu hogar. La lana de roca y la espuma de poliuretano suelen ser materiales adecuados para reforzar el interior de los muros de la casa.
7. La mano de obra es lo mas costo en una obra. Asi que eliges material de fácil y rápida aplicación. Si te atreves puedes poner la mano a la obra y pintar tu mismo por ejemplo.
8. Sustituye tus bombillas convencionales por LED o bombillas de bajo consumo, con las que podrás ahorrar hasta un 70% en el gasto normal de iluminación. Las calderas de condensación también ayudan a la eficiencia energética de tu hogar en lugar de los radiadores normales.
Los electrodomésticos son otro de los elementos que más consumen dentro del hogar. Si los eliges con el certificado AA+ayudarás a que tu consumo eléctrico sea también menor.
9. Consulta las ayudas y deducciones aplicables para la reforma de tu hogar, con las que puedes obtener el máximo beneficio a la hora de ahorrar en tu reforma. Consulta tanto las que ofrece el Gobierno, a través del Ministerio de Fomento, como las que proporcionan en su caso las Comunidades Autónomas.
Reformar tu casa supone un desembolso económico considerable, por eso te enseñamos las diferentes opciones para llevarla a cabo y cómo ahorrar en cada una de ellas. Para ahorrar en la reforma de tu casa, es muy importante dedicar un tiempo a realizar una buena planificación. De esta forma se determina: qué es lo que queremos reformar o las necesidades que impulsan la reforma, además de valorar la posibilidad de realizar, al mismo tiempo, otras mejoras en la vivienda. Descubre cuatro ideas de reformas integrales. Además, en el caso de las instalaciones, hay que contemplar la posibilidad de mejorarlas para que, a corto plazo, permitan ahorrar en las facturas de consumo los suministros del hogar. Aquí te enseñamos trucos sobre cómo reformar una casa.
A la hora de realizar una reforma hay varias opciones de llevarlo a cabo. A continuación, te mostramos las posibilidades y sus ventajas e inconvenientes.
1. Empresa de reformas
Lo más cómodo es acudir a unaempresa especializada en reformas, cuyo personal visite tu casa para darte un presupuesto. Este método se suele llamar, en el gremio, un “llave en mano”. La empresa se encargaría de todo: mano de obra, compra de materiales, transportes, etc.
Para que la reforma se realice con todas las garantías es importante tener en cuenta los siguientes factores:
Tres presupuestos: Pedir prepuesto a un mínimo de tres empresas para realizar un comparativo. Asegúrate de que los presupuestos contemplan las mismas partidas, mismos materiales y acabados.
Presupuesto detallado: Éste debe estar desglosado, es decir, que se especifique en él los materiales a emplear y sus calidades, así como la marca y modelo de los elementos que nos ofertan para la reforma. Los presupuestos deben ser por escrito, y nunca presupuestos verbales.
Impuestos: El presupuesto tiene que reflejar si incluye o no incluye impuestos, el 21% de I.V.A. o el 7% de I.G.IC. si estamos en Canarias.
Plazo: Se trata del planning de obra donde se detalle cómo será la evolución de los trabajos y en éste, debe reflejarse claramente la fecha de finalización. Puedes exigir que figure una cláusula de penalización en caso de incumplimiento del plazo. Esta suele contemplarse como un importe a descontar del presupuesto total por cada día de incumplimiento del plazo de finalización de las obras.
Formas de pago: La empresa reformista tiene que comprar materiales, realizar transportes, cumplir con pagos a sus proveedores para materiales para la casa. Pero nunca se debe pagar el coste total de la obra hasta que la empresa haya terminado y esté todo en perfecto estado. Por este motivo, este segundo pago debe hacerse, como mínimo, una vez que haya transcurrido la mitad del plazo que exista para la obra, y éste no debe superar tampoco un 25%, ya que llevaríamos pagado el 50% del importe total de la obra.
Ventajas e inconvenientes
Es más cómodo, pero no la más barata: lo que gastamos de más, lo ganamos en comodidad. Sólo hay que seguir la obra para estar atentos a su evolución, que sea lo acordado. Como inconveniente: Normalmente, la empresa de reformas son especialistas en trabajos de albañilería y suelen subcontratar los trabajos especializados (fontanería, electricidad, pintura o cerrajería). Por lo que, en realidad la empresa hace de intermediario, ganando un dinero que se puede ahorrar buscando el propietario por su cuenta a cada especialista.Las empresas agregan ganancias al precio de los materiales o elementos que se vayan a renovar. Por eso, es recomendable hacer un pequeño estudio de mercado de los materiales o elementos que se vayan a utilizar. La oferta es muy amplia, y, en muchas ocasiones, las empresas de reformas recurren siempre a lo mismos diseños, sin valorar la enorme variedad de modelos existentes en un gran abanico de precios.
2. Contrata a un arquitecto
Estos profesionales elaborarán un proyecto que contemplará un conjunto de documentos, mediante los cuales se definirá el diseño de la reforma antes de ser realizada:
Una memoria técnica. Ésta describirá toda la reforma a realizar en la casa, la situación previa, las necesidades y la justificación de la solución adoptada.
Planos: Definen al detalle todos los cambios a realizar en la reforma.
Pliego de prescripciones técnicas. Describirá las obras de reforma y se regulará su ejecución, con expresión de la forma en que se llevará a cabo, las obligaciones de orden técnico que correspondan al contratista, y la manera en que se llevará a cabo la medición de las unidades ejecutadas y el control de calidad de los materiales empleados y del proceso de ejecución.
Presupuesto: Integrado o no por varios parciales, con expresión de los precios unitarios y de los precios descompuestos, en su caso, estado de mediciones y los detalles precisos para su valoración.
Servicios ofrecidos
Dirigir la obra: Te guiará en la elección de materiales y te ofrecerá las mejores distribuciones para conseguir un resultado óptimo.
Controlará los plazos de ejecución. Garantiza la ausencia de tiempos muertos entre la actuación de los diferentes gremios (albañiles, electricistas, fontaneros).
Pueden dirigir sus propios equipos o asumir la dirección de una empresa de reformas integral. Además, en el caso de que haya cambios estructurales, la firma de un arquitecto es obligatoria.
Puesto que cada arquitecto tiene su estilo, hay que tener en cuenta, el importe y el diseño, además de valorar lo que más nos gusta y lo que menos, las ventajas y los posibles inconvenientes.
Por último, y no menos importante, hay que definir bien los plazos estipulados para la ejecución y las formas de pago.
Ventajas e inconvenientes
Suele ser la opción más cara, ya que, además de pagar a una empresa para que nos realice la reforma, hay que pagar un proyecto y/o los servicios de un proyectista. Esta opción es recomendable cuando se quiere hacer una reforma de gran envergadura, done se hagan cambios en las instalaciones de suministros de agua o eléctricos, o cambios estructurales, por ejemplo.
Las ventajas de esta opción, como ocurría en el caso anterior, lo que gastamos de más, lo ganamos en comodidad.
3. Haz tú de director de obra de tu reforma
Aunque lo más cómodo sea contratar una empresa o a un arquitecto para que nos haga la reforma, no es la opción más económica, por eso hacerlo uno mismo es la tercera opción. Si nuestro presupuesto es ajustado, es conveniente que seamos nosotros quienes actuemos como administradores, contratar sólo la mano de obra, siempre será la solución más económica. Las reformas son una gran molestia y merece la pena llevar a cabo los trabajos necesarios de una sola vez. A continuación, te damos algunos consejos:
Es importante que definas bien tu proyecto. Tienes que hacerte varias preguntas:
¿qué quieres reformar?
¿Cuál es tu presupuesto?
¿Cuáles son tus prioridades?
Una vez que claro lo que vas a reformar, el siguiente paso esmedir correctamente los espacios de la reforma, para calcular las cantidades precisas de material. Siempre es aconsejable, cuando se trate de materiales sujetos a corte (ladrillos, placas de cartón yeso, cerámica y azulejos, parquet, pintura) o de venta a granel (cemento, yeso, arena) comprar algo más de lo imprescindible,normalmente se suele comprar entre un 5 y 10% más, ya que están sujetos a cortes, o roturas o a deterioros.
Por otra parte, si tenemos espacio en casa, ese material sobrante puede servirte para reparar futuros desperfectos.Debes pensar a largo plazo, lo que inviertas hoy lo ahorrarás en un futuro. En el proyecto que prepares ten muy en cuenta que las obras pueden determinar, en gran medida, el consumo de energía que se realizará en la casa. Por lo tanto, invierte en cerramientos de calidad (ventanas, persianas), elige la calefacción que más te conviene (eléctrica, por gas o por leña), estudia la iluminación que precise cada cuarto para no emplear más vatios de los precisos. Échale un vistazo a las siguientes guías de ahorro en el hogar: Guía de ahorro de agua y energía y Guía de eficiencia energética.
Contactar con diferentes profesionales para que acudan a tu casa, den su opinión sobre la reforma y también ofrezcan sus ideas. Además, pídeles referencias de otros trabajos que hayan realizado para que tú puedas obtener información de primera mano de sus antiguos clientes. A estos, solicítales tres presupuestos y que en el contrato estén todas las condiciones detalladas, al igual que en las anteriores opciones.
Ventajas e inconvenientes
Es la opción más barata, pero es la que más implicación y planificación necesita. Tendrás que dedicarles todo el tiempo a la reforma, estando alerta a la evolución de la obra, controlando las calidades y acabados, los plazos y tiempos de ejecución, el control de los costes.
Consejos
Informarnos: Antes de afrontar la reforma, conviene visitar las páginas web u oficinas pertinentes del Estado o de la Comunidad Autónoma en la que se reside para informarse sobre las ayudas que puedan existir vigentes. Pueden haber subvenciones para la rehabilitación de la vivienda,que pueden afectar a la totalidad de la reforma o a partes de ella.
Permisos y licencias: Por otro lado, puede que necesitemos algún permiso o licencia del Ayuntamiento para llevar a cabo nuestra reforma. Las licencias varían en función del tipo de obra. Algunas necesitarán una licencia de obra mayor, en cuyo caso hay que presentar en el Ayuntamiento un proyecto firmado por un arquitecto.
No defraudar: Nunca debemos caer en la tentación de “trabajar en negro”, esta mala práctica puede salirnos muy cara. Sin duda, la gran ventaja de trabajar en negro es que podemosbeneficiarnos de mano de obra cualificada con muy pocos gastos; contratar a un trabajador sin estar dado de alta en la Seguridad Social. Realizar esta práctica muy habitual en el mundo de la reforma no es nada aconsejable, pues el trabajador es el principal afectado, ya que no tiene ningún tipo de derecholaboral. En caso de accidente, los trabajadores se encontrarán desprotegidos. Pero eso no es lo peor, ¿y si un inspector se planta en nuestra puerta para efectuar una inspección de trabajo? En ese caso el ahorro en costes que suponía contratarle en esas condiciones se convertiría en la mayor desventaja que nos pueda ocurrir, una multa y con ello una sanción económica de elevado importe.